Alojamientos vacacionales en Belmonte de Gracián

Rosa y su marido son los mejores hosts que he tenido desde que hago airbnb hace unos 10 años. Repetiré sin duda siempre que quiera una escapada de tranquilidad

Ell alojamiento es bastante grande, tiene 4 dormitorios, dos baños, la cocina, el comedor y el salón están como una grande habitación. Todo básico está en la casa que se puede necesitar, todo está limpio. Las duchas tienen la fortaleza del agua bastante bien, hay espacio para guardar la ropa. La vista a los paisajes en la ventana es espectacular. El pueblo está muy tranquilo, en la casa está solo este alojamiento, por eso no hay vecinos. Para el bebé estaba la trona y la cuna. Cerca del alojamiento hay muchas rutas de senderismo. Seguramente si quiere un descanso tranquilo es el lugar perfecto.

La estancia fue genial. Una casa muy recomendada, en un barrio muy tranquilo, ideal para desconectar unos días. Buena comunicación con la anfitriona. Sin duda, volveríamos a repetir.

La villa está en un lugar tranquilo donde hay vistas tranquilas de las montañas. Tiene buenas áreas y estaba limpio. Solo el estacionamiento no está a los pies de la casa, está a unos 200 metros de distancia.

Casa confortable y muy bien equipada,zona muy tranquila,con buenas vistas;perfecta para desconectar.Un detallazo por parte de Javier tenernos la calefacción al llegar.Ideal para ir con tu mascota.

Gente muy seria y amable. todo limpio y listo para entrada. 100% recomendable.

Los apartamentos son grandes y están muy bien ubicados, hemos estado super agusto y Guillermo y Fernando nos han ayudado en todo momento siendo super atentos. Volveríamos encantados.

La casa muy espaciosa, y con todo lo que tiene que tener. Nos encantó disfrutar de la barbacoa, que yá tenia la leña preparada. Guadalupe, muy atenta y dispuesta a ayudar en cualquier cosa. La única pega, son la falta de tiendas o restaurantes en el pueblo, es necesario un poco de previsión. Volveremos, seguro!!!

Casa Mimbrela está hecha con mucho amor y mucho estilo. No le falta detalle en nada y además te hace sentir que estás en casa. Es uno de los mejores alojamientos en los que he estado. Al llegar nos recibió con detalles como huevos de sus gallinas, magdalenas y productos locales de la zona, el cotillón de fin de año... extremadamente perfecto. Ha sido el lugar perfecto para despedir el año.