Renta de alojamientos vacacionales con jacuzzi en Mirasol

Casa hermosa y cómoda, bien equipada. Muy buena comunicación con Jaime y Mariela.

Me sentí como en mi casa, hubo comunicación todo el rato con la encargada, muy amable. Fue todo muy agradable

El lugar hermoso, amplias e iluminadas dependencias, menaje y blanco completísimo (superó mis expectativas), entretención para niños, el hot-tab genial. Lindo entorno y playa para relajarse. Y los anfitriones, fantásticos. Sin duda regresaré. Ah, y vale lo que pagas.

Magnífica experiencia para poder desconectarse y tomar un descanso necesario, Mabel muy amable y comprensiva, estuvo durante todo momento presente en las consultas y requerimientos que necesitábamos, sin duda una estancia para regresar muchas veces, recomendadisimo al 100%

Cristian es super buen anfitrión, estuvo pendiente desde que llegamos hasta que nos fuimos y con buena disposición en todo momento. La casa es maravillosa, tal cual se ve en las fotos y muy amplia y cómoda! cómo familia quedamos encantados, sin duda volveríamos :)

La estadía fue extraordinaria, mejor de lo que pudimos imaginar, estar frente al mar y con vista a la puesta de sol en primera fila no tiene precio, la hospitalidad de la casa, el anfitrión y el lugar vale la pena mil por ciento. Además poder disfrutar del jacuzzi frente al mar y relajarse de la vida citadina es realmente exquisito. Si buscan desconectarse, sentir el sonido del mar y las mejores puestas de sol este es su lugar. La experiencia al dormir puro relajo. Además hay libros y juegos para acompañar tu estadía y una parrilla bakan para compartir. Muchas gracias a Jaime y Catalina.

Muy linda casa, cómoda y amplia. Entorno hermoso, vistas muy lindas y muy tranquilo Excelente anfitrión . Rodrigo muy atento

Aunque estuvimos solamente por el fin de semana, lo pasamos muy bien. La casa la recibimos en óptimas condiciones y todos los artefactos funcionan a la perfección. El mobiliario de muy buena calidad y me encantó la decoración que hace que cada habitación sea muy acogedora y con un sello especial. Les saludo agradecida

Buen lugar para descansar en familia , limpio , organizado y lo mejor la tinaja a libre disposición, fácil de manejar y realmente es el broche de oro , volveremos de todas maneras , a nuestros niños les encantó. Gracias !!

Es un lindo lugar para descansar y desconectarse. Fui con mi perrito y el disfrutó un montón el terreno, la mayoría del recinto está cercado por lo que era seguro para que estuviera libremente. La cabaña es sencilla y acogedora, quizá para invierno puede dificultarse el no contar con un comedor dentro de la cabaña por el frío. El espacio del quincho increíble para disfrutar. La tinaja estuvo increíble, volveremos de todas maneras.

Cabaña impecable con vista espectacular, mucho mejor que en las fotos! Servicios y utensilios en perfecto estado para disfrutar unos días de descanso en un ambiente muy tranquilo. Volvería con seguridad!

Excelente lugar para relajarte, tranquilo privado , libre uso de tinaja, detalles de cortesía que se agradecieron, lugar para comprar cerca. Piscina a pesar de no ser privada, se pudo disfrutar como tal . Lugar limpio y bastante cómodo Recomendable

Excelente lugar para ir con tu familia. Amplio, con una tinaja exquisita, entorno relajante que te invita a descansar, un monton de amenidades y juegos para compartir y con unos anfitriones excepcionales! Excelentes masajes! no se lo pierdan!

Muy lindo el lugar, privado y tranquilo, si o si volvemos

Un lugar y una casa super acogedora, limpia y con todo lo necesario para tener unos dias de relajo en familia y disfrutar de la paz reunidos en el fogon o en esa tinaja que te relaja del extress, todo muy bien coordinado, confiable y Don Raul muy amable y coordial, mil veces recomendado.

Hermoso loft en un lugar tranquilo, privado, limpio, la cama muy cómoda, disfrutamos de la tinaja en la noche rodeada de árboles y luces, muy lindo, nos encantó, anfitriona amable nos recomendó lugares, fuimos a almorzar al restaurante pueblo viejo que queda muy cerca y también a playa el canelillo. Volveríamos felices.