Alojamientos para estancias largas en Mombeltrán

Hemos pasado unos días maravillosos en Mombeltrán. La casa de Javier es tal y como se muestra en las fotos, tiene un espacio exterior muy cómodo para que los niños puedan jugar sin peligro, una zona de barbacoa muy agradable y el interior de la casa tiene todo lo que necesitas para estar cómodos. Nos ha encantado el pueblo y sus alrededores. Recomendamos esta casa para conocer la zona, sin duda.

La casa de Alejandro es un lugar idílico donde pasar unas buenas vacaciones. Es ideal para cualquier época del año, tiene, piscina, calefacción, chimenea y aire acondicionado y unas vistas maravillosas. Mi pareja y yo hemos estado en Semana Santa, celebrando nuestro décimo aniversario. Y no podíamos haber hecho una mejor elección, el pueblo de Arenas es muy bonito y tiene cosas qué hacer y muchas rutas para los que es guste hacer caminatas y senderismo por la naturaleza. Tiene de todo, para todos los gustos. Alejandro nos hizo recomendaciones de rutas, restaurantes. En fin todo lo que preguntamos nos respondió muy amablemente. La casa estaba impecable y tiene de todo para ofrecer una estancia comodisima, tiene hasta una Air fryer, totalmente nueva. La recomiendo encarecidamente y si volvemos por la zona, sin duda repetiremos. En definitiva te sientes como en casa, un hogar al que volver. Gracias por todo Alejandro y Casa La Peguera. HASTA PRONTO

La casa de Luis Miguel es un paraíso para disfrutar del paisaje y de tranquilidad. Es un sitio MUY RECOMENDABLE.Una casa con encanto y comodidades donde he pasado con mi familia unos días estupendos. Ha sido un placer para nosotros conocer a Luis Miguel que ha estado pendiente en todo momento súper atento para solucionar cualquier pregunta. Nos proporcionó información sobre restaurantes y actividades de la zona. La casa muy acogedora y nos hemos sentido como en nuestra casa.

Nuestra estancia en La Casa de Chocolate, en Cuevas del Valle, ha sido inmejorable. La casa es preciosa, cómoda y decorada con muchísimo gusto, perfecta para disfrutar de unos días de desconexión en plena naturaleza. Todo estaba cuidado al detalle, y nos sentimos como en casa desde el primer momento. El entorno es una maravilla: rodeado de montañas y con rutas preciosas muy cerca, ideal para los amantes del senderismo o simplemente para quienes quieren respirar aire puro. Un detalle que nos encantó fue la bienvenida con unas riquísimas rosquillas caseras, un gesto que refleja el cariño con el que los anfitriones cuidan a sus huéspedes. En general, todo nos gustó muchísimo: la tranquilidad, el entorno, la limpieza, la comodidad… Sin duda, La Casa de Chocolate es un sitio al que volveríamos con los ojos cerrados. ¡Muy recomendable!